Nota

EN 11 MESES LA UAN GESTIONÓ RECURSOS EXTRAORDINARIOS POR 120 MILLONES DE PESOS.

Actualmente las universidades públicas padecen la escasez de recursos públicos. Situación que mina sus capacidades para atender la demanda educativa, desarrollar infraestructura e invertir en la capacitación de los docentes; la Universidad Autónoma de Nayarit no es la excepción. Sin embargo, las autoridades universitarias han respondido de forma eficiente y han gestionado exitosamente aproximadamente 120 millones de recursos externos en los últimos once meses, cifra histórica en los últimos 6 años.

Una parte importante de esos recursos (36 millones 38 mil 993 pesos) se obtuvo a través del Programa de Fortalecimiento a la Calidad Educativa (PFCE), una iniciativa del Gobierno Federal que otorga recursos extraordinarios a las instituciones de educación superior para que los canalicen a rubros que mejoren la calidad de la oferta educativa.

Otra parte se obtuvo de los fondos extraordinarios ofertados por la SEP. En Extensión Académica de Ixtlán del Río y en la Unidad Académica de Enfermería se construyeron y equiparon edificios destinado a la impartición de cátedra; en la Unidad Académica de Turismo se construyeron los laboratorios de Gastronomía y actualmente se construye el edificio de aulas de la Licenciatura en Nutrición. Estas obras suman poco más de 8 millones de inversión. Estos nuevos espacios contribuirán a expandir la oferta educativa en la región y ofrecerán a las jóvenes instalaciones educativas de primer nivel.

A través de la LXIII Legislatura de la Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión se obtuvieron más de 10 millones de pesos que fueron invertidos en el equipamiento y rehabilitación de 34 aulas de nivel medio superior y 37 de nivel superior. También, se utilizaron alrededor de 3 millones de pesos obtenidos a través del Fondo de Aportaciones Múltiples para dar mantenimiento a más de 6 mil 889 metros cuadrados en las 15 Preparatorias de la UAN a lo largo y ancho del Estado de Nayarit.

Un actor importante en la gestión de esos recursos es Aldo Zea Verdín, director de la Unidad de Desarrollo Institucional (UDI), quien es consciente de que, así como los recursos abren ventanas de oportunidad también deben asignarse de forma eficiente y ejecutarse bajo una disciplina financiera estricta basada en la transparencia. Al respecto, en una entrevista, señalo: “Esto implica muchos compromisos para la institución respecto a los indicadores que tenemos que cumplir e invertir como indicadores académicos y planeación, el gasto y la programación.”

Otro actor importante es el rector Ignacio Peña, quien decidió ver más allá del plan de austeridad financiera y tomó la batuta para liderar la búsqueda de recursos externos. Gracias a su esfuerzo y el de su equipo, la comunidad universitaria puede disfrutar actualmente de instalaciones de calidad que le permiten satisfacer sus necesidades intelectuales y de esparcimiento.