La Universidad Autónoma de Nayarit recibió un monto de 32, 780, 859 millones para actividades de investigación en el periodo de 2016-2017, un 107.47% más de los recursos obtenidos en el ciclo anterior. Cabe mencionar que el 99.4% de esas aportaciones corresponden a financiamiento externo. La importancia de esos recursos radica en el potencial que tienen para impulsar la generación de conocimientos básicos y aplicados, los cuales pueden conducir a un mejor entendimiento de los temas de relevancia regional e internacional o generar soluciones creativas que impacte positivamente el entorno productivo. Adicionalmente, los recursos coadyuvan también a la formación de recursos humanos de alto nivel.
Un factor importante que permitió obtener esa cuantía de recursos externos es la consolidación paulatina que ha logrado la Universidad de sus cuerpos académicos (CA). Mientras que en el 2016 se tenían registrados 66 cuerpos académicos, para el año 2017 se cuenta con 71, de los cuales 40 están reconocidos como en formación, 21 están en consolidación y 10 están consolidados. Los cuerpos académicos son grupos de investigación especializados conformados por investigadores de alto nivel, que se agrupan en torno a temas diversos como son Lengua y cultura, Sustentabilidad energética, Estudios culturales, Gestión de empresas familiares y enfermería y prevención de adicciones, entre otros. Dichos grupos de investigación son los que mayormente aplican los recursos derivados del financiamiento, bajo un enfoque centrado en el avance del conocimiento y la creación de innovaciones.
Es importante señalar que la obtención de recursos externos y la consolidación de los CA no es algo casual, sino el producto de una gestión eficiente de la Secretaría de Investigación y Posgrado (SIP), que dirige la Dra. Laura Isabel Cayeros, quien sobre el asunto señaló: “los investigadores son cada vez más reconocidos, porque están haciendo una labor con impacto social, estando más cerca de la sociedad nayarita, y eso habla bien de la UAN. El posgrado funciona en la UAN porque tenemos recursos humanos de alta especialización, la institución tiene capacidades instaladas en cuanto al quehacer científico bastante importantes”.
En un contexto nacional donde el subsidio a la ciencia ha disminuido en los años recientes, es alentador observar que en la administración del rector Ignacio Peña se ha decidido afrontar las dificultades apelando al talento de los académicos y la buena gestión de los directivos. Sin duda estos resultados garantizan que en el futuro la UAN seguirá reafirmando su liderazgo a nivel regional como un centro de reflexión, ideas creativas e innovaciones que abonen al desarrollo social y económico del estado.